En los últimos tiempos han aparecido varias marcas de miras ópticas que lograron ubicarse en un segmento medio entre calidad y funcionalidad, al alcance de un público masivo y sin perder por ello las prestaciones necesarias para cumplir adecuadamente con su función. Dentro de esas marcas, Shilba se ha destacado desde un principio por ofrecer una amplia gama de modelos que cubren diversas necesidades. En esta oportunidad, incursiona con un nuevo modelo –Skorpion– destinado a la modalidad del long range, que posee aumentos variables de 2,5x a 15x y se puede utilizar sin inconvenientes tanto en la caza convencional como en disparos a largas distancias. Para esta última modalidad, ha sido equipada con torretas graduadas en milirradianes y un corrector de paralaje.
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Sistema competitivo
El corrector de paralaje es de suma importancia para miras que superen los 12x de aumento, ya que los errores de desviación angular por la posición aparente de un objeto se hacen más evidentes.
La corrección se realiza desde una tercera torreta, lo que es un sistema más adecuado que el que utiliza un aro frontal. Y también más caro de fabricar, lo que habla de la importancia que Shilba le ha dado a este modelo para competir en un segmento de gran auge. El hecho de que se encuentre graduada en milirradianes (que es una medida métrica) hace que sea más comprensible para nosotros, lo que facilita las regulaciones. Tengamos presente que un milirradián equivale a 10 centímetros a 100 metros, y las torretas corrigen 1/4 de milirradián por cada click.
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En cuanto al retículo, es un mildot, que se denomina así porque la distancia entre sus puntos (dot) equivale a un milirradián, contrariamente a lo que la gente piensa que el mil es por militar. Esta particularidad permite –si conocemos de antemano el tamaño de un objeto que visualizamos– observar cuántos puntos o líneas de milirradianes de nuestro retículo abarca, lo que con un sencillo cálculo nos permitirá conocer a qué distancia se encuentra. Ejemplo: si el blanco tiene un metro de lado y ocupa 10 miliradianes en nuestro retículo, sabremos que se encuentra a una distancia de 100 metros.
Mejoras en el contraste
Dueña de una construcción sólida, el tubo de la Skorpion tiene un diámetro de 30 mm, lo que nos garantiza una corrección suficiente y evitar tener que utilizar montajes especiales para disparos a larga distancia. Otra particularidad para destacar es su eye relief (distancia del ocular al ojo) de 101 mm, lo que nos evita riesgos al utilizar grandes calibres con fuertes retrocesos.
Sus cristales están multitratados (Fully Multi Coating), lo que garantiza un mejor contraste de la imagen y mayor transmisión de luz. De esta manera, en conjunto con el diámetro de 50 mm de su lente frontal, asegura una buena visión con pobres condiciones de luz. Sin duda, los aficionados a las modalidades que necesitan una mira de estas particulares características, encontrarán en este modelo un elemento de suma utilidad a un precio altamente competitivo de U$S 570.
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