A diferencia de nuestro país que no tiene ningún tipo de medida con respecto a la pesca de la corvina negra, del otro lado del Río de la Plata, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) declaró la veda precautoria anual de la pesca de esta especie con una extensión hasta el 15 de enero de 2025 dado un “ingreso extraordinario de ejemplares”. La resolución decretada por la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) fue subida por Conservación de Especies Nativas del Uruguay (COENDU) la pasada semana en Instagram, donde afirmó que se ha “incrementado en forma significativa el esfuerzo pesquero” de preservar a este tipo de pez.
Las grandes corvinas siguen presentes en Reta
La corvina negra (Pogonias cromis) se caracteriza por ser longeva y de crecimiento lento, además de tener una tasa de mortalidad y fecundidad baja, lo que según el Dinara la hace particularmente susceptible a la pesca. La especie habita aguas costeras, especialmente donde hay influencia de arroyos, ríos y lagunas, sobre fondos de arena y limo, formando cardúmenes para migrar a los fondos de puesta, indicó la declaración. Al ser una especie costera, se encuentra en puntos donde frecuenta la actividad pesquera.
La temporada de migración y reproducción ocurre en los meses de octubre a diciembre, donde cada año se establece la veda. Con el fin de asegurar la sustentabilidad de la corvina, se prohíbe su extracción “bajo cualquier modalidad, en todos los ríos, arroyos y lagunas que desembocan tanto en el Río de la Plata como en el Océano Atlántico” y, en esta ocasión, se extendió la fecha hasta enero.
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