Hablar de la ciudad de Maipú es remitirse, para los pescadores deportivos, en laguna Kakel Huincul, un ámbito en el que supimos a encontrar a un personaje inolvidable José Luis Santilli, más conocido como el Hippie, antiguo concesionario de un espejo que era sinónimo de esas dos especies emblemáticas: buenas tarariras en verano y pocos pero robustos pejerreyes en invierno, los llamados Kakelitos, que había que pescar a la distancia entre claros de juncales, una pesca más parecida a una cacería al acecho que a la modalidad tradicional de pesca de pejes.
La desaparición física de aquel gran amigo de los pescadores, seguida de una sequía tremenda agravada por falta de obras en la compuerta para retener el agua, hizo que el ecosistema de esta bella laguna que conserva los juncos ya perdidos en otros ámbitos, peligraba por completo. Con el tiempo, sufrió altibajos, siempre condicionada por la escasez de precipitaciones, pero en el último tiempo se vio favorecida por un mejoramiento en el nivel y una recuperación lenta pero constante. En tiempo invernal, dio buenas faenas con los pejerreyes, y a medida que se afirmaban las buenas temperaturas, empezaron a aparecer las tarariras y las carpas, grandes ejemplares que saben leer y escribir en este ámbito.
En Punta Negra apuestan por el pejerrey
La noticia de estos días tiene que ver con lo que informa la Secretaría de Cultura, Educación y Turismo, ya que Ignacio Etchelet, integrante de esta repartición viajó a Chascomús, para trasladar 40.000 alevinos de pejerreyes, que fueron sembrados en la Laguna Kakel Huincul. La Intendente Municipal Interina Prof. Lorena Otermin junto a Etchelet hicieron entrega a Marcelo Acebal, actual concesionario del espejo, de los ejemplares que fueron traídos desde la Estación Hidrobiológica de Chascomús, de donde se distribuyen los huevos, alevinos y juveniles de pejerreyes para una importante cantidad de lagunas de la República Argentina y países limítrofes.
Esta siembra significa un valioso aporte para la conservación de la fauna autóctona del espejo de agua. Técnicamente, los alevinos pasan a ser juveniles a los 25 días donde, por su velocidad y tamaño, tienen garantizada la supervivencia. Vale consignar que los ejemplares adquieren un peso de entre 150 y 200 gramos y un tamaño de 13 a 15 centímetros al cumplirse el primer año de vida, duplicando prácticamente estos valores luego del segundo año.
En plena primavera se duplican los reportes que hablan de siembras y aportes a espejos de agua que necesitan de un plus de vida para su reproducción natural. Ojalá los pescadores cuiden y respeten tanto cupos como medidas mínimas, al igual que la naturaleza aporte lo suyo para que sigamos soñando con volver a ver a Kakel Huincul como en sus momentos de gloria.
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