Siempre hablamos de lo difícil que son las esperas para los pescadores. Las vedas o los periodos en los que una u otra especie detienen su actividad pueden ser irritantes para muchos aficionados que no tienen la habilidad de ser pacientes. Les suele pasar a los mosqueros con su larga espera de mayo a noviembre para volver a ir por las truchas a la Patagonia. Pero también le sucede a los fanáticos de los señuelos y especialmente de la tararira, un pez que desciende su actividad en el periodo invernal y obliga a muchos cañófilos a guardar los muñecos por varios meses. Para alegría de estos últimos, las Hoplias han seguido activas casi todo el año en algunos puntos, siendo Ramallo un destino destacado. A finales de mayo seguíamos mostrando buenas faenas y ya en este inicio de septiembre volvemos a compartir memorables salidas.

100 destinos para abrir septiembre a pura pesca

Ramallo, sin lugar a dudas, es un pesquero que tiene cantidad y calidad de taruchas para disfrutar en este momento, a días del inicio de la primavera. Fiel reflejo de ellos son las excelentes embarcadas que viene haciendo Fernando Rolandi, guía reconocido y a quién conocimos en Weekend por el siempre recordado Luis Ventimiglia. Luiggi era un asiduo de la zona, y vaya si el rinde no lo justificaba, con una multiplicidad increíble de especies durante todo el año. A los dorados que venían firmes se sumaron las tarariras, y sin olvidar la chance de cachorros, buenas manduvas y decenas de alternativas que encuentra el pescador en este destino del norte bonaerense.

Rolandi nos contaba que viene pasando mucho tiempo sobre la embarcación con clientes que quieren aprovechar los buenos rindes. Aunque el dorado mermó un poco por las grandes heladas y la lluvia abundante que cayó en la zona y enturbió el agua, lo mejor pasa por la pesca de tarariras. Parte del pasado fin de semana se dio con gomas, más abajo, pero ya desde el domingo 8 se activaron en superficie. Cuando el sol ya calienta, pasadas las tres de la tarde, el pique se pone excelente e ilusiona de cara al futuro. Si se obtienen estas faenas en pleno invierno, lo que podría llegar a ser en tiempo estival.

Mayo, a puro pique de tarariras en Ramallo

La pesca se arranca con gomas con cucharas, y con el correr del día se vuelve a los anti enganche de goma, como ratas o ranas. En el caso de los dorados, que se ven lomear en abundancia, el pique se obtiene con señuelos pala 2, en una actividad que se volverá a poner excelente en las próximas horas con aguas más limpias. Se navega bastante, se actúa en estructuras de arroyos y desbordes de los mismos. Aunque muchas de las tarariras son medianas a chicas, también se dan de las que superan los 3 kg. Un plan imperdible y sin necesidad de grandes viajes. Para agendar.





























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