Lancha Rodman 790 Ventura SD: disfrute sobre el agua

La nueva embarcación española Rodman 790 Ventura SD es una equilibrada opción para disfrutar de la navegación y de la comodidad a bordo. Más allá de ser tipología daycruiser o crucero diurno, con consola central y espacios a proa y popa para un óptimo confort, ofrece la posibilidad de pasar algunos días con una buena habitabilidad interior.  

La gama Ventura comenzó a gestarse el pasado año con una serie de embarcaciones fuera de borda, de esloras comprendidas entre los seis y los ocho metros en diferentes versiones de cubierta: open con consola central, open con la proa cerrada y también cabinadas con hard top. Con la presentación de este nuevo modelo, el astillero se consolida con cuatro opciones introducidas en las dos últimas temporadas, en diferentes versiones y configuraciones.

Cubierta y cockpit

Las soluciones de confort y la experiencia del astillero ya se dejan intuir tan pronto nos embarcamos por la plataforma de popa de la banda de babor, protegida por un pasamanos alto, un buen punto de agarre tanto para transitar como a la hora de tomar un baño. La versatilidad del cockpit en popa está dada por un asiento que se desplaza longitudinalmente para maximizar el espacio, ya sea en su posición normal o con la opción de transformarse en solárium. La funcionalidad y modularidad de esta cubierta se completa con la posibilidad de elegir un módulo para asiento de timonel y acompañante, con respaldo abatible y espacio para incorporar heladera y cocina. De serie se ofrece con dos asientos individuales giratorios.

Para acceder a proa se han diseñado pasillos laterales elevados por ambas bandas, para poder así maximizar el volumen interior. El desplazamiento por cubierta se hace con comodidad y seguridad gracias a un razonable ancho de paso, un robusto guardamancebo perimetral de la consola de gobierno y sendos pasamanos en ambas bandas a la altura de las colchonetas de solárium. Este espacio se puede equipar con respaldos reclinables. La proa, de forma redondeada y con delfinera abierta, facilita tanto la maniobra de fondeo como el paso para embarcar o desembarcar.    

Navegación y conclusiones

Con una eslora de casco de 6,96 m y una manga de 2,50 m, esta nueva Rodman 790 logra tener una muy buena estabilidad tanto en a la deriva como en navegación. En el agua, la configuración en V con geometría variable del fondo, deflectores y escalón, le facilitan al timonel mantener una conducción ágil y confiable en todo momento. Los virajes son rápidos y precisos, y con un motor fuera de borda de 300 HP alcanza una velocidad máxima a todo gas de casi 42 nudos a un régimen de 6.000 vueltas. Las soluciones de confort y la experiencia del astillero en la construcción de embarcaciones de trabajo están a la vista con cada ola que enfrentamos, ya que no se siente ningún tipo de ruido en la estructura en general.

Al mando, nos encontramos con un panel de gobierno casi en vertical, perfectamente protegido por el parabrisas envolvente, con una buena distribución y un óptimo posicionamiento del volante y la palanca de aceleración del motor. La sensación al timonearla es la de una nave fácil de manejar y confiable ante cualquier situación. 
Con una capacidad de combustible de 315 litros y a un ritmo de crucero de entorno a los 25 nudos a unas 4.500 RPM, su autonomía puede situarse en torno a las 180 millas náuticas. Distancia suficiente para considerar a este daycruiser como un pequeño crucero que invita a pasar a bordo más de un día con la tranquilidad de que tenemos todo lo necesario para disfrutarlo.