El mayor festival de autos, motos y lanchas clásicas de Sudamérica se realizó en el Hipódromo de San Isidro, a mediados de octubre, en su 22° edición. Fue la oportunidad para revivir la historia automovilística de todo el mundo a través de una exposición de más de 1.000 autos, motos clásicas de categoría internacional y lanchas históricas.
300 lanchas dieron vida a la fiesta del dorado
Allí se celebró el 120 aniversario de Rolls Royce con la exhibición de una variada colección de ejemplares de diferentes épocas. Muchos de estos autos llegaron al país como 0 km en la época de "la Argentina potencia". Son verdaderas carrozas de lujo, llenas de detalles artesanales y motores tomados como auténticas obras de arte. Los propietarios prometieron poner en marcha sus unidades de manera ocasional, para apreciar la perfección de su funcionamiento, con la ausencia de cualquier tipo de vibración mecánica.
También se celebró el 110 aniversario de Maserati con la exhibición por primera vez en un mismo sitio de las cuatro exponentes de la marca más importantes que hay en nuestro territorio. Son la 8CL Monoposto Grand Prix (de 1940, "La Maserati del Pueblo", con la que Raúl Riganti corrió las 500 Millas de Indianápolis 1940 y que fue ganadora del premio al mejor auto del show), la 4CL Monoposto Grand Prix (de 1946, corrida por Tazio Nuvolari, Carlos Fortunati Firpo y Vittorio de Rosa), la 250 F Monoposto Grand Prix (de 1956, corrida por José Froilán González en el Gran Premio de Argentina de 1956) y la 4CLT Monoposto Grand Prix (de 1949, con la que Juan Manuel Fangio logró cinco triunfos durante su campaña en Europa junto a la escudería del Automóvil Club Argentino). Las cuatro Monoposto estuvieron acompañadas por un interesante despliegue de Maseratis de calle de diferentes épocas. Una fiesta para los ojos de los fanáticos de la marca del Tridente.
Por último, el 60 aniversario de Porsche 911 y Ford Mustang, dos de los deportivos más famosos de todas las épocas que siguen vigentes. La exposición organizada por el Porsche Club Argentina y el importador Nordenwagen incluyó una carpa especial donde se exhibieron seis ejemplares del 911 más preciado por los amantes de la conducción: la saga completa de los RS. Por otro lado, uno de los muscle-car más famosos de la historia argentina, el Ford Mustang festejó el ingreso a la veteranía con un enorme despliegue de unidades de todas las épocas en Autoclásica. Como es habitual, la exhibición giró en torno al stand de Zschocke Motorsport y el Club Mustang of Argentina.
Museo Náutico Argentino
La rica historia de la náutica de nuestro país estuvo presente este año a través del Museo Náutico Argentino. Un grupo de emprendedores motonautas y empresarios del sector que pugnan por poner en valor la historia y el patrimonio de la actividad. Ellos montaron un importante stand con lanchas de distintas épocas, de competencia y de paseo. Además, ofrecieron una amplía serie de objetos como motores marinos y material didáctico (fotografías, artículos periodísticos, cuadros, etc.) que ilustran y muestran el gran patrimonio histórico y cultural que cuenta la entidad.
Además, y uno de los aspectos más destacados que tiene este grupo de nostálgicos, es que ellos estuvieron presentes en el stand y de esa manera interactuaron con el público explicando aspectos técnicos, históricos y deportivos de las embarcaciones que expusieron y también narraron sus experiencias en la actividad.
En esta ocasión, la ganadora del premio a la mejor lancha clásica del show fue la Chita XXII, una lancha Paglietini Codinet, con una eslora de 4,46 mts y manga 1,78 m diseñada por Oscar Paglietieni y construida en su astillero en el año 1969. Entre la infinidad de títulos que posee esta embarcación podemos destacar que fue Campeona Argentina en Clase X1 en los años 1971 y 1972 y Campeona Metropolitana en O1/X1 en 1972. Ademas posee el record argentino de velocidad de 108 km/h en 1972, y es propulsada por un motor Mercury de 6 cilindros en línea, 1500 cc y 100 hp conocido por sus famosas tres trompetas, al mando de los pilotos German Barbot y Nestor Sarthou.
También entre el resto de las embarcaciones destacamos la CUCO, primera lancha de construcción en serie del país, realizada en madera de cedro y fondo en “V”. Diseñada por Oscar Paglietini y construida en su astillero en 1940, fue recientemente restaurada por el astillero Regnícoli en 2023. Posee una eslora de 4,70 mts y una manga de 2,30 mts, esta motorizada por un motor central con línea de eje Ford V8 de 60 hp y 2.500 cc marinizado, con el cual llegaba a desarrollar 75 km/h.
Para cerrar, en stand del Museo Náutico Argentino acompañaban la lacha de madera Ara Bera de 1964, restaurada por el recordado carpintero naval Jose Raponi; la Orca Gt de astillero Regnícoli de 1966; la Avan 505 de 1967 y un catamarán fabricado por el astillero cordobés Campanilli de 1975. En cuanto a los antiguos motores marinos fuera de borda, el más destacado fue el Evinrude monocilindrico de 3,5 hp del año 1915.
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