A veces no se necesita el modelo más caro o la marca más distinguida para obtener el camper que buscamos, también existe la posibilidad de construirlo por nuestra cuenta, un camino un poco más difícil, pero más satisfactorio y con posiblemente mejores resultados. Un caso para admirar es el de Sheridan, quien decidió llevar una vida más apegada a la naturaleza, por lo que compró una van Ram ProMaster 3500 y la convirtió en un increíble camper.
Sheridan trabajaba como electricista, pero por aquellas cosas de la vida decidió dar un giro radical y pasar más tiempo lejos de la ciudad, trabajando como fotógrafo y escritor de viajes. Para ello necesitaba un vehículo que le permitiera viajar y vivir prácticamente en cualquier lado. Así nació de sus manos este camper que no tiene nada que envidiarle a cualquier modelo fabricado en serie.
Para esta nueva forma de vida es fundamental que el vehículo sea habitable durante todo el año, es decir, que se adapte a las 4 estaciones. Para ello cuenta con calefacción y aire acondicionado en el techo, y un panel solar de importantes dimensiones en el techo, que genera hasta 370 vatios.
El mismo sirve para alimentar el interior del camper, que cuenta con un sistema eléctrico bastante importante de 11 tomas de corriente y 28 luces LED regulables. Además, los tanques de agua tienen sensores para controlar los niveles y desagües eléctricos.
Más allá del equipo, el diseño del interior está muy bien logrado, Sheridan ha sabido aprovechar cada metro para conseguir un hábitat sumamente cómodo, práctica y completo.
La cocina es completa, pero se destaca por una heladera de gran tamaño, que incluye congelador. También hay una pequeña mesa desplegable para el comedor. A su vez, también hay un baño completo con ducha e inodoro.
Al fondo del camper se encuentra el dormitorio, equipado con una cómoda cama matrimonial. La misma se encuentra elevada, ya que abajo está la zona de carga, que también alberga a las baterías, el inversor y el depósito primario de agua dulce.
En el vídeo, Sheridan afirma que lleva un mes viviendo en la furgoneta, a pesar de que no está totalmente terminada. Aun así, le resultado parcial es más que satisfactorio.
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