En lo alto de la meseta tibetana, lejos del bullicio y las luces, China está construyendo, en el más absoluto de los silencios, el que será el telescopio más grande del mundo gracias a sus 14,5 metros de diámetro. De esta manera, este futuro gigante óptico superará a todos los actuales, incluidos el Hubble (2,4 metros) y el James Webb (6,5 metros).
Si bien por el momento el gobierno del gigante asiático no dio ninguna información oficial al respecto, la noticia fue dada a conocer a través de un artículo publicado recientemente en el diario estadounidense Wall Street Journal, que, como era de esperar, no hizo más que encender las alarmas científicas en todo el mundo.
Telescopio más grande del mundo: secreto a voces
El misterio en torno al proyecto es tan intrigante como el propio telescopio. Así, mientras una teoría sugiere que China prefiere avanzar sin interferencias externas ni competencia adelantada, otra, apunta a motivos estratégicos e, incluso diplomáticos. Durante siglos, construir el telescopio más grande ha sido casi una obsesión astronómica. Cuanto más grande es el espejo, más luz recoge y, por lo tanto, más lejos y con mayor detalle se puede ver. Esa luz trae consigo secretos: atmósferas de exoplanetas, galaxias jóvenes, y quizá, señales de vida. Actualmente, los telescopios más grandes alcanzan los 10 metros, por lo que este nuevo coloso chino cambiará las reglas del juego actualmente vigentes.
Los astrónomos del mundo miran hacia el este. Estados Unidos avanza con el Telescopio de Treinta Metros en Hawái y Europa levanta el ELT en Chile con un espejo de 39 metros. Sin embargo, ninguno de ellos está listo todavía. Si China completa su telescopio antes, tendría una ventaja histórica, aunque sea momentánea, en la carrera por explorar el cosmos.
Más allá de la competencia tecnológica, estos proyectos son motores de inspiración. “La astronomía es una droga de entrada para la ciencia y la ingeniería. Cada avance alimenta el sueño colectivo de entender de dónde venimos y hacia dónde vamos. Y, aunque hay geopolítica en juego, los descubrimientos que surjan gracias a este telescopio beneficiarán a toda la humanidad", comentaron los especialistas.
"Este próximo gran telescopio será una enorme ventana a lo desconocido, porque cada imagen más nítida, cada estrella nueva, es una pequeña victoria de la especie humana. El futuro promete tanto competencia como cooperación en esta fascinante carrera por mirar más lejos que nunca", concluyeron.
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