Si bien a lo largo del tiempo, la humanidad construyó miles de represas ya sea con el objetivo clave de garantizar el uso de agua potable, como, así también, con el fin de generar energía eléctrica o evitar ciertas catástrofes naturales, todas comparten un principio: almacenar agua. Sin embargo, ese almacenamiento masivo alteró la estructura natural del planeta, según afirma un reciente estudio elaborado por un equipo de científicos de Universidad de Harvard.
Además, la investigación plantea que el agua acumulada habría desplazado casi un metro los polos de la Tierra en relación al eje de rotación natural del planeta. Ese fenómeno se denomina “Desplazamiento Polar Verdadero”.
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Eje de la tierra: sorprendente desplazamiento
"Más allá de lo minúsculo del cambio, pudieron llegar a traer consecuencias geofísicas importantes, ya que el aumento de embalses también modificó el nivel de la masa oceánica, al tiempo que las consecuencias del accionar humano, acumuladas en siglos pero intensificadas en las últimas décadas, podrían ser más relevantes de lo que se creía hasta ahora", señala el estudio.
Aunque las represas existen desde hace más de 3.000 años, el trabajo se centró en las construidas en los últimos 180 años. Se analizaron más de 6.800 represas alrededor de todo el planeta y sus metodologías para almacenar el agua. La distribución y ubicación del peso de estos embalses habría generado alteraciones físicas en la Tierra. "La construcción de una presa monumental en China afectó al eje de rotación del planeta y, como resultado, ahora, los días son unos 0,06 microsegundos más cortos”, afirma la NASA.
La presa en cuestión es la central hidroeléctrica de las Tres Gargantas, en el río Yangtsé. Este gigantesco proyecto es capaz de contener más de 40 mil hectómetros cúbicos de agua, equivalente a 40.000 millones de toneladas. “Es la ubicación y la magnitud de esta reserva lo que generó que se modifique el centro de la masa y la gravedad del planeta. Esta central produce alrededor de 100 TWh anuales de energías renovables, lo que la convierte en la más grande del mundo en rendimiento desde hace siete años", agregaron los científicos.
Los estudios también analizaron cómo las represas afectan el nivel del mar al señalar que las aguas aumentaron entre unos 12 y 17 centímetros aunque las represas absorbieron más de una cuarta parte de esa cantidad de agua. "La ubicación de los embalses también incide ya que, dependiendo en qué lugar se ubican los embalses y las represas, el nivel del mar también se modificará. “Nos quedamos atentos a estos cambios que pueden llegar a ser muy significativos”, concluye el estudio.
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