El increíble tirador Jerry Miculek, quien colaboró con Mossberg para crear la 940 JM Pro, disparando su obra. Foto: Weekend

La amplia boca de carga y el elevador, rediseñados para permitir la carga de cartuchos con mayor facilidad. Foto: Weekend

Líneas elegantes y aspecto profesional, aunados con una terminación excelente en esta nueva Mossberg. Foto: Weekend

Tres chokes externos de la marca Briley vienen de fábrica y pueden intercambiarse sin usar herramientas. Foto: Weekend

Guiones Hi-Viz de fibra óptica facilitan una rápida adquisición del blanco, aún en días de baja luminosidad. Foto: Weekend

Palanca de carga y botón liberador del cerrojo sobredimensionados hacen juego con el cásico seguro de la marca. Foto: Weekend

El corazón del sistema de toma de gases recubierto de nitruro de boro reduce la acumulación de carbón. Foto: Weekend

La culata permite, merced a los suplementos incluidos, modificar su largo y variar la inclinación. Foto: Weekend

SINERGIA ENTRE DEPORTE Y FABRICACION

Mossberg940 JM Pro: nacida para competir

Con el asesoramiento del campeón mundial Jerry Miculek, la empresa estadounidense lanzó al mercado una escopeta especialmente creada para las competencias de tiro dinámico.

Por Pablo Crespo

Siempre afirmé que la escopeta es el arma total. Multifacética por excelencia, se han creado modelos para cada necesidad. No obstante, en su utilización en disciplinas deportivas dinámicas –como el tiro práctico, por ejemplo– ha llevado a los usuarios a realizar customizaciones para adaptarla mejor a las particularidades de la competencia.

Mossberg, para su nueva 940 JM Pro, recurrió a uno de los tiradores más rápidos de la especialidad –el increíble Jerry Miculek, secundado por su hija Lena– y así conocer cuáles son las características necesarias para crear un arma totalmente competitiva al más alto nivel. Como muestra de esa colaboración, las iniciales JM acompañan la denominación del modelo.
Tratar de hacer que una escopeta se adapte a las demandas del deporte y a las exigencias del tirador es algo costoso y que requiere de conocimientos técnicos. Comencemos por extender el tubo cargador para tener mayor capacidad, sobredimensionar comandos y adaptar la culata. Todo ello en un arma cuyas características de fábrica estuvieron pensadas para otro uso.
La 940 JM Pro no sólo buscó mejoras externas, sino que se abocó a evitar uno de los problemas de las escopetas semiautomáticas por toma de gases: la suciedad difícil de limpiar, producto de restos de pólvora que se adhieren al metal. Un recubrimiento de nitruro de boro en las partes expuestas a los gases evita que esos restos provoquen un mal funcionamiento. Prueba de ello es que puede realizar más de 1.500 disparos sin necesidad de un mantenimiento. Por otro lado, su rediseñada toma de gases permite utilizar cartuchos de los más diversos gramajes, aún intercalados.

Diseño de avanzada

Otro detalle que tuvieron en cuenta es la modificada boca de carga que –con la práctica suficiente (que seguramente Jerry Miculek tiene)–, facilita introducir de a cuatro cartuchos. Los sobredimensionados controles externos (manivela de carga y botón de liberación del cerrojo) permiten un rápido accionamiento. El seguro –como en todas las Mossberg– está colocado en lo que a mi modo de ver es el lugar más acertado: al alcance del pulgar de la mano que empuña, de fácil acceso y totalmente ambidiestro.

La culata de polímero puede ser modificada en su largo e inclinación gracias a una serie de complementos que equipan la 940 JM Pro: un detalle no menor que permite adaptarla fácilmente a cada tirador. Usualmente, maximizar el rendimiento de una culata requiere por lo general de los servicios de un artesano costoso y experimentado, ya que un ajuste adecuado ayuda a disparar con mayor comodidad y precisión.
Tres chokes de la marca Briley pueden ser intercambiados sin necesidad de herramientas gracias a su estudiado diseño. Y el cañón de 24 pulgadas de longitud donde puede alojarse es de nueva configuración, con banda ventilada, mira frontal de fibra óptica HiViz con excelente visibilidad, ideal para un encare rápido. Tener un guión brillante al frente marca la diferencia cuando se necesita disparar a gran velocidad. Si no le gusta el color, cámbielo, ya que se incluyen tubos adicionales.

La capacidad de carga –9+1 cartuchos– es la suficiente para disputar cualquier torneo de tiro dinámico sin inconvenientes y sin que el arma quede desequilibrada por el peso extra en la parte delantera. Nada ha sido dejado sin estudiar. La experiencia de Mossberg en la fabricación de escopetas y los detalles requeridos por uno de los más rápidos y experimentados tiradores del mundo dan como resultado un arma de excelente nivel competitivo.

Ya sea para los torneos de tres armas (Tri Gun) que se disputan en los Estados Unidos cada vez con más frecuencia, o para nuestras competencias de IPSC en la modalidad escopeta, la nueva Mossberg 940 JM Pro es sin duda el arma ideal.

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