Estratégicamente ubicado a pocas cuadras del límite con el oeste del Gran Buenos Aires y a tan solo 20 minutos del centro de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el estadio del Club Atlético Vélez Sarsfield es uno de las canchas de más fácil acceso del fútbol argentino.
Su nombre oficial es Estadio José Amalfitani, en honor a quien fuera su presidente y principal responsable de su construcción, durante más de 30 años. Multitudinarios encuentros políticos y religiosos, recitales de cantantes y de bandas nacionales e internacionales, como Soda Stereo, Bon Jovi, Luis Miguel, Kiss, Queen y Sting, por mencionar apenas algunos ejemplos, y hasta el Papa Juan Pablo II y el combinado nacional de rugby –Los Pumas– pisaron el siempre impecable césped del “José Amalfitani” a lo largo de las últimas décadas, convirtiéndolo en un estadio multiuso.
El último partido que los hinchas pudieron acercarse al José Amalfitani para alentar en vivo al equipo de sus amores antes del parate por la pandemia del coronavirus fue el miércoles 4 de marzo de 2020 en la derrota por 1-0 ante Godoy Cruz, correspondiente a la 20ª fecha de la Superliga.
Por eso, a pesar de seguir sin poder concurrir a su segunda casa, los hinchas velezanos esperan con muchas ansias el duelo ante Huracán que tendrá lugar hoy sábado 31 de octubre, a partir de las 16.15 horas, en uno de los partidos correspondientes a la primera fecha de la zona 6 de la Liga Profesional para ilusionarse con otro campeonato local.
La historia del estadio José Amalfitani
El 1 de enero de 1910, en la casa de Nicolás Marín Moreno, se formalizó la fundación del Club Atlético Argentinos de Vélez Sarsfield. El primer presidente fue Luis Barredo y la flamante institución conformó dos equipos: uno de Tercera y otro de Cuarta División.
En 1919, el club pasa a llamarse Club Atlético Vélez Sarsfield, obtiene su primer ascenso a Primera División y se consagra Subcampeón del Campeonato de la Asociación Amateurs de Football. La convocatoria de hinchas era tal que, en 1924, los dirigentes deciden alquilar un terreno ubicado en la intersección de las calles Basualdo y Guardia Nacional, en el barrio porteño de Villa Luro en donde, cuatro años más tarde si iba a jugar el primer partido nocturno del fútbol argentino.
El nuevo estadio fue bautizado como “El Fortín” por el periodista Hugo Marini, por entonces jefe de Deportes del diario Crítica, en alusión a la apariencia de la canchita y a su fama de inexpugnable.
Con el equipo en la segunda división del fútbol argentino y sin cancha propia donde jugar de local, en 1943, el club logró la cesión de un pantano lindante al arroyo Maldonado por parte de las autoridades del Ferrocarril Oeste.
Foto: Viejos Estadios
Si bien se trataba de terrenos anegadizos y totalmente irrecuperables, José Amalfitani y un grupo de colaboradores aceptaron gustosamente la donación y se pusieron a trabajar inmediatamente en un proyecto para construir un estadio de madera que fuese orgullo no solo para el barrio porteño de Liniers, sino para todo el país.
Tras dos años de arduos trabajos consiguieron rellenar el pantano y, acto seguido, comenzaron a trabajar en la construcción de las tribunas con los tablones del viejo Fortín. Así, el 11 de abril de 1943, Vélez inauguraba su propio campo de juego en un partido amistoso ante el flamante campeón, River, que terminó igualado 2-2.
En 1947 se colocó la piedra fundamental para la construcción del actual estadio y los históricos y viejos tablones de madera del Fortín de Barragán y Gaona comenzaron a ser reemplazados por una imponente estructura de cemento, que iba a ser inaugurada el 22 de abril de 1951 para orgullo de todo el fútbol argentino. La fiesta de inauguración no pudo ser mejor, ya que Vélez derrotó 2 a 0 a Huracán con dos goles del exquisito puntero y goleador Raúl Nápoli.
Pero los sueños de don José Amalfitani parecían no tener techo. Por eso, el 6 de diciembre de 1968, en un partido amistoso nada menos que contra el Santos de Pelé, el club velezano estrenaba la mejor iluminación de América en campos deportivos. Cuatro imponentes torres de 45 metros de altura con focos de cuarzo-yodo y lámparas HKI combinadas establecían las bases de una luminosidad que aseguraba lo más moderno en la materia, a tal punto que con ella ya no habría que modificar nada al momento que se impusiera la televisación en colores.
Cuál es la capacidad del estadio de Vélez
Tras la remodelación que sufrió para poder ser subsede de la Copa del Mundo Argentina 1978, el José Amalfitani pasó a tener una capacidad de 49.540 personas, distribuida de la siguiente manera:
Platea local
- Platea Norte Baja: 1.728 personas
- Platea Norte Media: 1.932 personas
- Platea Norte Alta: 5.091 personas
Platea visitante
- Platea Sur Baja: 5.817 personas
- Platea Sur Alta: 6.072 personas
Popular local
- Popular Este: 14.700 personas
Popular visitante
- Popular Oeste: 14.200 personas
Medidas del campo de juego, instalaciones y accesos
De los más grandes del país, el campo de juego de Vélez Sarsfield tiene 105 metros de largo por 70 de ancho y entre sus modernas instalaciones cuenta con dos vestuarios de 300 metros cuadrados cada uno para los jugadores, y 48 baños de entre 40 y 60 metros cuadrados ubicados tanto en las tribunas populares como en las plateas (25 para los hombres y 23 para las mujeres).
A esto hay que sumarle las 21 cabinas para la radio y televisión, las 114 butacas para los medios gráficos y una sala de conferencia ubicada en el vestuario local, con capacidad para 50 personas.
Sus facilidades de acceso y desconcentración, sus sistemas de seguridad, sus comodidades interiores y sus perfectos ángulos visuales, hacen que El Fortín sea uno de los mejores escenarios para ver y disfrutar un partido de fútbol en la Argentina.
Cómo llegar al estadio Vélez Sarsfield
Ubicación: Av. Juan B. Justo 9200, Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Los colectivos 107A, 145C2, 182B, 1B, 2, 5, 63A, 63B, 96E y el tren San Martín pasan por las inmediaciones del estadio.
Mapa de acceso a los estadios de Primera División de la Argentina
Coordenada del estadio de Vélez Sarsfield: -34.6354, -58.52069
Hacé clic sobre el estadio para obtener la ruta, el estado del tránsito y el tiempo de viaje.
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