A mediados de julio, la presencia de los panzones se vuelve una atracción en distintos escenarios de pesca de la costa atlántica del país. Aunque presente todo el año, a partir de este tramo comienza a brindar alegrías a los aficionados que van a buscarlo a su zona de confort, sin dudas, los bancos o fondos de arena. Uno de los sitios que se destacó el último fin de semana fue Miramar, playas que suelen rendir muy bien con esta variedad de pejerreyes y que reunió a un grupo de pescadores que son parte de Pasión de Pesca, el espacio que lidera nuestro amigo Marcelo Arias.
Según nos contaban, en la oportunidad, la acción con los panzones se centró en las inmediaciones a la zona del vivero, pesqueros como el pozo de las latas, Frontera Sur y Ebomar. Un océano totalmente planchado y agua algo turbia en algunos puntos. Aunque no fue una faena abundante, la calidad de los pejerreyes capturados conformó a más de un aficionado que pudo dar con ellos.
La especie mostró más actividad en el comienzo de la bajamar, cuando se da cuenta de que en el lugar donde está pronto habrá menos agua, aunque con el inicio de la pleamar también se obtuvieron capturas. Tiros cercanos al banco de arena que se forma entre las dos canaletas y con aparejos que constaban de una boya elevadora, dos brazoladas con anzuelo n° 1 y un plomo de anclaje de 140 g. Siempre, pero siempre, es clave el uso del rulero con mucha ceba. La carnada más rendidora fue el camarón entero con filet de magrú.
A juzgar por los resultados obtenidos durante el último domingo 20, y a pesar de las variables condiciones climáticas que han afectado a los pesqueros en las últimas semanas, si el mar se encuentra “pescable”, es posible hacerse de muy buenas capturas. Lejos de ser una pesca explosiva en cantidades, la calidad ilusiona y entusiasma a los más fanáticos que están ansiosos de disfrutar de la actividad en el mar, caña en mano y ya pensando en lo que será una nueva temporada de pesca fuerte en la costa atlántica.
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