Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir. Foto: weekend

VIAJES

7 paisajes de Irlanda tan hermosos como desconocidos

Lagos, acantilados, valles y mucho más. El país europeo cuenta con una belleza natural que vale la pena descubrir.

Por BELLEZA EUROPEA

Si Irlanda forma parte de tu próximo viaje a Europa, no podés dejar de visitar alguno de estos lugares.

Lago Derryvegal

Este mágico espejo de agua se encuentra en la península de Beara, es un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la vida silvestre, mientras se aprecian los neblinosos picos de las montañas y el profundo bosque que rodean al lago. Su belleza paisajística es un atractivo innegable para los amantes de la fotografía.

Glen de Glenariff

Es uno de los nueve Glens de Antrim. Los Glens son valles que miran al mar y que se destacan por su belleza natural. El de Glenariff es conocido como la “reina de los Glens”. Con tan solo echar un vistazo a la foto, uno de inmediato entiende por qué. Cerca de allí se encuentra el parque forestal de Glenariff, un oasis frondoso repleto de cascadas y paseos junto al río.

Slieve League

Los acantilados de Slieve League, en el condado de Donegal, es uno de esos lugares donde la naturaleza lo deja a uno sin palabras. El imponente mar extendido en el horizonte, la brisa marina soplando alrededor y los embates de las olas contra las rocas, una conjunción de elementos que convierten a este sitio en una parada casi obligada para los turistas. Si se desea retratar este paisaje, lo mejor es dirigirse al punto más alto de los acantilados, donde hay una impresionante caída de 609 metros.

Colina de Uisneach

Se dice que esta zona es el antiguo centro de Irlanda, marcado por la famosa Aill na Míreann (la Piedra de las Divisiones). También se considera el lugar de descanso de Lugh, dios del sol. Aquí también se puede observar la bella escultura de madera del escultor Richie Clarke, que representa a esta deidad legendaria a orillas del lago Lough Lugh, donde se dice que encontró su fin como mortal. Esta colina no solo ofrece un hermoso paisaje, sino que también tiene mucho folclore y leyendas para descubrir.

Castillo de Clough Oughter

La fortaleza, hogar del clan O'Reilly, se construyó en el siglo XII en un crannóg (isla artificial) en medio de un lago, en el condado de Cavan. Estas antiguas piedras encierran secretos de familias enfrentadas, batallas intrépidas e historia antigua. Se ofrecen salidas en barco guiadas por el lago y el castillo, que forma parte del Geoparque Global de Marble Arch Caves, situado junto al parque forestal de Killykeen.

Mirador de Flagstaff

Cerca de la ciudad de Newry, el mirador de Flagstaff es un sitio para pasar un buen rato con la cámara fotográfica en mano debido a que ofrece vistas espectaculares de Carlingford Lough, los Mournes y las montañas Cooley.

Lago Glencar

Este lago es un verdadero oasis que regala un momento inolvidable de tranquilidad rodeado de un marco natural impactante, como empinados acantilados sobre sus orillas y cascadas que se forman en las cercanías, la más famosa quedó inmortalizada por las palabras del gran W. B. Yeats, en su místico poema The Stolen Child.

Fuente: www.ireland.com