Santa Fe con una inyección de vida en los ríos

Cuando los pescadores se acercan a cualquier punto de nuestro litoral se encuentran con un paisaje que hace mucho tiempo no se veía. Las embarcaciones se ubican donde corresponde, al borde de los ríos caudalosos, y sin necesidad de buscar la forma de ingresar al mismo haciendo malabares. Con poco navegar o, con suerte, desde la costa, advertimos cardúmenes de mojarras que explotan en la superficie tras el ataque de algún predador. Tras años de seca, los pronósticos se cumplieron y por la corriente de El Niño, toda la cuenca del Paraná tiene niveles importantes, con condiciones que se van a prolongar durante el verano, lo que implica condiciones ideales para el desove, aunque generará problemas en las poblaciones ribereñas como viene aconteciendo en algunos puntos del norte del país.

La altura del río generó que el sistema de humedales esté lleno de agua y de vida, permitiéndole salir, después de una bajante de tres años, a cardúmenes que han estado encerrados en lagunas y en lugares de poco acceso. Ese impulso extraordinario permite recuperar fuentes de trabajo y ver el futuro con optimismo para tantos prestadores amigos, como es el caso de Pablo Cañete de Agustina La Pescadora, quien nos contaba que desde su lancha volvieron a ver La Cascada de Coronda al máximo esplendor de caudal y también, con momentos de pesca muy interesantes. Ellos no sólo llevan pescadores, también hacen avistajes de aves, acampadas, paseos o un simple viaje a la isla a comer un asado.

Se advierten muchos alevinos de todas las especies, hasta la devolución de un pacú, según nos decía Pablo, quien viene, desde algunas semanas, haciendo las mejores pescas sobre las aguas de la Laguna Setúbal, la misma que baña las costas de la ciudad de Santa Fe. Esté ámbito atrae a miles de personas para disfrutar de su costanera, realizar actividades físicas, tomar mate o simplemente disfrutar del paisaje que genera el espejo también llamado de Guadalupe y que es uno de los reservorios más importantes de agua, con aproximadamente unos 35 km de longitud de Norte a Sur y una superficie de unos 92 km². Recibe agua permanentemente del arroyo Leyes y el arroyo Potreros, y semipermanentes de los arroyos Saladillo Dulce y Saladillo Amargo.

Variedad de especies, entornos soñados y capturas sobresalientes son las posibilidades que brinda el Paraná en la provincia de Santa Fe, además de poder transitar cursos más pequeños como el Colastiné u otras lagunas como la de Coronda. Ya la naturaleza le dio el agua que necesitaba y pobló de vida, ahora sólo hay que disfrutar y cuidar. 

Servicios: 

• Agustina La Pescadora, Cel: 0342-155322843. agustina.la.pescadora@hotmail.com Facebook e Instagram: