La Momia del Aconcagua fue encontrada el 8 de enero de 1985. Foto: Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de Mendoza.

Los restos momificados pertenecen a un niño de 8 años que murió en un ritual religioso inca. Foto: Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de Mendoza

Parte del ajuar encontrado junto al cuerpo sin vida del niño inca. Foto: Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de Mendoza

La momia fue encontrada de casualidad por un grupo de andinistas argentinos. Foto: Dirección de Patrimonio Cultural y Museos de Mendoza

RESTITUCION HISTORICA

Tras casi 38 años, la Momia del Aconcagua regresará al lugar donde fue encontrada

Se trata del cuerpo momificado de un niño inca de 8 años que había sido encontrado el 8 de marzo de 1985 por un grupo de andinistas argentinos que escalaban la montaña más alta de América.  

A pocos meses de cumplirse 38 años de su hallazgo, la llamada Momia del Aconcagua regresará al lugar donde fue encontrada, ubicado a unos 5.300 metros de altura del cerro Aconcagua, Mendoza, según informó la Dirección de Patrimonio Cultural y Museos, dependiente del Ministerio de Cultura y Turismo de esa provincia cuyana.

Considerado uno de los hallazgos arqueológicos más importantes del mundo, la momia pertenece al cuerpo de un niño de 7 años que fue ofrecido en sacrificio durante uno de los habituales ritos religiosos de los incas que habitaron esa zona allá por el año 1.500.

Su cuerpo momificado fue encontrado de casualidad y en perfecto estado de conservación debido a las bajas temperaturas reinantes en el lugar, el martes 8 de enero de 1985, por un grupo de andinistas argentinos que se encontraban escalando el pico más alto de América.

Según informaron desde la mencionada cartera provincial, si bien la momia regresará a su lugar de origen en el cual se construirá un centro de reflexión para los turistas, será depositada en una cripta, por lo cual seguirá sin ser exhibida al público, tal como sucede desde que fuera trasladada al Centro Científico Tecnológico (CCT) de Mendoza, donde se encuentra conservada en perfecto estado.

Aunque, una vez construido el centro de reflexión en el Aconcagua, los turistas sí podrán apreciar parte del ajuar que se encontraron junto a los restos momificados del niño, como un “uncu” (túnica o camiseta andina, carente de mangas) de lana, unas ojotas confeccionadas en lana y pelo, con la suela de fibra vegetal, y 6 estatuillas incas de oro y plata de más de medio metro de altura cada una.

Siempre estuvo la idea de que volviera a su lugar, por supuesto, en condiciones para su conservación y con toda una muestra para la interpretación de la cultura”, afirmó el arqueólogo mendocino, Víctor Durán, al diario Los Andes.

“Que la provincia pueda llevarlo adelante es una excelente noticia porque es un hallazgo patrimonial que habla mucho sobre nosotros. Exhibir las piezas con las que se encontraron los restos del niño inca va a ser un gran atractivo para los mendocinos como para el turismo internacional”, concluyó el especialista.

 

 

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