Desde hace varias semanas que venimos indicando la presencia de pasto en distintos escenarios de la costa bonaerense. De diferente tonalidad, algunos más pesados, todos terminan convirtiendo al aparejo del pescador en una guirnalda. Los anzuelos se tapan de suciedad, las carnadas pierden su atracción y los plomos se desanclan producto de la importante presión que ejerce el alga sobre el aparejo. En Miramar, Mar del Plata y especialmente en las últimas horas, Necochea han informado acerca de este fenómeno. Daniel Gallo, colega con su programa radial en la ciudad, compartió un video que permite apreciar la impresionante cantidad de algas rojas.
Según señala el portal local Diario Necochea, las algas rojas, también conocidas como rodófitas, se hicieron presentes en las playas del distrito en un fenómeno que se viene repitiendo los últimos veranos. Se trata de una especie que no es dañina para la salud. Según señalan, se suele dar casi siempre entre finales de enero y principios de febrero. En esta ocasión, el arribo se concentró sobre todo en las playas del centro y la zona del muelle de los pescadores. El diario indica que el color rojizo característico y llamativo se debe a la presencia del pigmento ficoeritrina. Muchos de estos organismos habitan en lugares profundos y sus pigmentos les permiten captar longitudes de onda de luz solar que penetran más allá en el agua. Por otra parte, la aparición de estos organismos también funciona como indicador ecológico. En este sentido, la presencia de rodófitas es una muestra de las condiciones marinas favorables en la zona.
De acuerdo a las estimaciones del portal, la proliferación en las playas se debe a que las algas se reproducen en las zonas bajas y medias del litoral en las costas rocosas y, ante una fuerte marejada, son arrancadas por la potencia de la rompiente y arrastradas en la dirección del oleaje. Si bien, por lo general las especies de algas que llegan a Necochea no son perjudiciales para la salud humana, cuando se aglomeran pueden generar un olor desagradable al ir descomponiéndose al sol. Por esta razón, en los últimos veranos el municipio procedió a quitar los colchones de algas acumulados en la arena. Cabe destacar que la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos del municipio, cuenta desde hace unos años con tecnología y herramientas específicas para esta tarea. Se trata de una moderna máquina barredora que es tirada por un tractor y cuenta con una especie de rastrillo conformado por miles de púas que permiten el paso de la arena y la recolección de cualquier otro tipo de objeto.
Por otra parte, si bien todo apunta a que se trata de la misma especie inofensiva para la salud de los últimos veranos, viene bien prestar atención a las recientes recomendaciones del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). Este organismo especializado, aconseja no recolectar moluscos ni mariscos en las playas ni tampoco adquirirlos en puestos callejeros o al pie de las embarcaciones a pescadores no autorizados. Estas recomendaciones tienen el fin de evitar cualquier tipo de intoxicación por las llamadas mareas rojas. Este fenómeno es causado por una masiva proliferación de algunas especies de algas microscópicas (microalgas) cuando determinados factores del ambiente (temperatura, luz, pH, disponibilidad de ciertos nutrientes, salinidad, entre otros) se tornan favorables para su multiplicación.
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