Tras más de tres décadas de luchas y reclamos llevadas a cabo por diferentes asociaciones ambientalistas locales y nacionales, por entidades científicas y por numerosas organizaciones no gubernamentales, entre ellas Fundación Vida Silvestre, finalmente la Legislatura de Tierra del Fuego sancionó, por unanimidad, el proyecto de ley que declara Área Natural Protegida a Península Mitre.
Estratégicamente ubicada en el sureste de esa provincia patagónica, Península Mitre es considerada una zona de enorme valor ambiental gracias a contar con el mayor reservorio de carbono de todo el país, atesorados en sus 2.400 kilómetros cuadrados de turbales, entre otras particularidades de su ecosistema único y de su vasto registro de yacimientos arqueológicos.
“Estallo de felicidad, porque conozco el proceso. Península Mitre, aparte de ser un lugar fantástico, para la provincia es un escenario nuevo porque agrega un sector marino muy importante”, relató, a FM Master´s, el licenciado Germán Pale, de la Fundación Vida Silvestre, tras conocerse la noticia.
.“Esta designación es muy importante porque la provincia tiene varias áreas protegidas, pero solamente terrestres, como Corazón de la Isla, Laguna Negra, Playa Larga e Isla de los Estados, entre otras, a las 12 millas del mar territorial que rodean a toda Península Mitre se le agregan 4 millas alrededor de isla de los Estados, dando una solución de continuidad entre ambos sectores. Son, en definitiva, 670.000 hectáreas marinas, casi el doble que las terrestres, agregó el especialista.
Si bien la sanción de esta Ley fue recibida con suma beneplácito por todos sus propulsores, Pale advirtió que es apenas el comienzo de un complejo proceso para llegar a la efectiva protección de toda la zona.
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“La sanción de esta Ley es como un nacimiento. Claramente es para celebrar, sobre todo por lo largo que fue el proceso de gestación. Pero, por supuesto que ahora el escenario cambia para bien, porque de ser un anhelo, pasa a ser la responsabilidad de la gestión pública”, señaló Pale.
“Ahora tenemos que afrontar el desafío de empezar a pensar cómo implementarla. Todas las áreas tienen una ventana de tiempo, que es el plazo para el plan de manejo, delinear los objetivos fundamentales y, así, van a garantizar la conservación de los objetos relevantes, con la participación de todos los actores interesados”, concluyó el representante de Fundación Vida Silvestre.
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