Los paisajes de la Patagonia ofician de freno de mano: si uno no baja una cambio aquí, poco queda por hacer. Protagonista central de la Comarca Andina del Paralelo 42 (integrada también por El Hoyo, Epuyén, El Maitén, Cholila, Paraje Golondrinas y el Parque Nacional Lago Puelo), El Bolsón invita a vivir días intensos en contacto con la naturaleza, con la cordillera andina a un lado, y su muralla privada, el cerro Piltriquitrón, al otro.
Afianzado en el programa “BienEstar”, propuesta que pone en valor la forma de vida local y esa energía tan especial de la localidad, entran en escena sabores y recetas bien caseritas que guardan la historia de manos familiares y un férreo respeto por la tierra; tratamientos enfocados a la salud física y mental, con interesantes terapias que elevan al pueblo por encima de una mirada peyorativa respecto de lo hippie o naturista, como supo sembrarse en algunas capitales del país; e infinitos rincones paisajísticos que son una salida en sí misma, muchas de acceso libre y gratuito.
Al Bosque Tallado
Una mañana fresca y bien patagónica nos recibe con sus primeras luces y un aroma a ciprés envidiable. Así arrancamos una caminata para terminar de despertar a los dormidos, cuando la bruma de la cordillera aún baña el valle, y el sol pega de frente sobre el cerro Piltriquitrón, el inmenso paredón que protege el valle y es el alma del pueblo. Caminamos en grupo, entrándole al cerro en zigzag, acaso la única manera sortearlo, en compañía de Marcelo López, escultor local. Cuentan que arriba hay varios refugios, con una vista privilegiada y un entorno perfecto para el desenchufe. Nosotros vamos a un punto intermedio, donde el trabajo de López y otros artistas recobró la vida de una ladera de árboles exterminados.
Nota publicada en la edición 495 de Weekend, diciembre de 2013. Si querés adquirir el ejemplar, llamá al Tel.: (011) 4341-8900. Para suscribirte a la revista y recibirla sin cargo en tu domicilio, clickeá aquí.
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