La técnica que se conoce como palada lateral resulta imprescindible para equilibrar el kayak cuando hay oleaje o sufrimos una pérdida de equilibrio súbita. La idea es emplear la cuchara de la pala para lograr apoyarse en el agua efectuando un movimiento con el remo. Se utiliza con frecuencia cuando las aguas encrespadas escoran el kayak. La práctica constante nos brinda una máxima estabilidad, y siempre hay que ensayarla por ambas bandas. Cuando empezamos la técnica, la cuchara de la pala debe ubicarse lejos del costado del kayak y en posición paralela a la superficie del agua: la cuchara empujará con la parte cóncava.
Una vuelta en kayak al Paraná de las Palmas
Tipos de apoyos laterales.
Hay cuatro: alto, medio, bajo y con forma de ocho. En las primeras prácticas recomendamos ejercitarlo en aguas someras de no más de 50 cm de profundidad, para evitar el vuelco y la consiguiente pérdida de tiempo en vaciar el kayak y regresar a la práctica. Tengamos presente que este tipo de apoyo también puede servir para cambiarle la dirección al kayak. Lo primero que haremos será escorarnos hasta el punto que observamos la pérdida de equilibrio. A continuación colocaremos la pala en la posición de remada pero poniendo la cuchara sobre la superficie del agua. Los codos deben mantenerse bajos y pegados a la cubierta para que la hoja de la cuchara apoye plana y efectuemos un pequeño barrido en el agua. Rápidamente observaremos que este movimiento neutraliza la escora y nos vuelve a una posición de equilibrio. Hay que realizar el ejercicio cientos de veces para lograr ubicar el torso del cuerpo y que los brazos se alineen de forma automática. Como dijimos, hay cuatro modalidades de apoyos. El bajo se emplea cuando la escora es pequeña o hay olas de escasa altura. Es un tipo de apoyo muy fácil de aprender y no requiere una gran escora del kayak. Es una maniobra muy útil de emplear en todo momento para tener equilibrio adicional en el kayak, como sacar una foto, tomar agua, acomodarnos en el cockpit, etc.
El apoyo medio se emplea cuando la pérdida de equilibrio se hace marcada o enfrentamos oleaje lateral. En esta maniobra siempre está presente el vuelco porque el kayak se coloca en una posición crítica. Hay que buscar el punto de equilibrio para no volcar y emplear el canteo antes de colocar la pala en el agua para apoyarnos. Por último, el alto se emplea cuando el kayak está volcado y nuestro recurso final antes del rol es efectuar esta maniobra de supervivencia. En este caso el cuerpo ya está sumergido en el agua y la pala efectuará la palanca necesaria como para adrizarnos. No es una maniobra sencilla pero con algo de práctica lograremos tomarle la mano.
Con movimiento de ocho.
Es un tipo de apoyo lateral que permite quedarnos con el kayak escorado de manera casi indefinida. Antes de ejercitar esta maniobra en el agua, resulta ideal practicarla en tierra, hasta lograr una cadencia o soltura en la remada. La pala debe efectuar un movimiento de ocho dentro del agua que paulatinamente se acerca a la banda del kayak. Cuando comenzamos a dominar esta maniobra es fácil advertir que con el movimiento logramos una gran sustentación del kayak que impide el vuelco.
El mayor respeto.
Para los que se adentran en el mar recordemos las palabras del más famoso kayakista del mundo, Derek Hutchinson: “El mar es un medio que nos resulta extraño, desconocido e inesperado, particularmente sobre un kayak, impulsados únicamente por la fuerza de los brazos y dirigidos por la experiencia y el conocimiento del palista”.
Las 4 instancias del apoyo lateral:
Nota completa publicada en revista Weekend 532, enero 2017.
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