Como en las mejores épocas, ya se entra a Uruguay casi sin controles. Foto: Patricia Daniele

Como en las mejores épocas, ya se entra a Uruguay casi sin controles. Foto: Patricia Daniele

Como en las mejores épocas, ya se entra a Uruguay casi sin controles. Foto: Patricia Daniele

Como en las mejores épocas, ya se entra a Uruguay casi sin controles. Foto: Patricia Daniele

EN PRIMERA PERSONA

Así ingresan a Uruguay los viajeros internacionales

Volver al país vecino fue un imposible para los argentinos durante dos años. El verano pasado se aligeraron muchas de las exigencias y hoy se ingresa casi sin tener que cumplir requisitos: solo una declaración jurada on line en la que conste el calendario de vacunación y contar con un seguro médico. Relato de la experiencia.

Por Patricia Daniele

Después de un par de años de pandemia, en los que la autoridades uruguayas restringieron el movimiento en las fronteras se produjo un alivio en los requisitos de ingreso al país vecino. Viajé a la preciosa ciudad de Colonia vía Buquebus con dudas todavía de cómo sería recibida y fue casi como si no hubiera pasado el tiempo. Con los pasajes en mano, hice la declaración jurada on line que pide el gobierno uruguayo: datos de la procedencia y destino del viaje, registro de vacunación contra el Covid y la exigencia de contar con un seguro médico. Sin este último paso no permite seguir el trámite, solo hay que poner el nombre de la empresa que da la cobertura. Se envió un comprobante a mi correo electrónico.

Pero cuando llegué a la ventanilla de Buquebus solo me pidieron el DNI, Pregunté por la declaración jurada y me dijeron "En Migraciones". Bueno, seguí hacia ese sector, el de la salida oficial del país y en la ventanilla entregué documento personal y pasaje. Me peguntaron el motivo del viaje y nada más. Eso fue todo. Imaginé qué, como la declaración era en línea, la verían en pantalla.

Subimos al barco y, después de poco más de una hora, estábamos en puerto uruguayo. Descendimos de barco esperando algún control y nada. Nada de nada! Retiramos las maletas, las pasamos por el detector de aduana y ya estábamos afuera de la terminal, sin que nadie nos hubiera pedido comprobante alguno. Este es solo el relato de lo sucedido, puede que a otras personas las controlen más. Yo puedo decir que fue todo tan laxo, armónico y sencillo que ni se sintió. Y muy placentero, claro.

Cabe aclarar que, al regreso, las autoridades argentinas  piden que se complete una declaración jurada on line dentro de las 48 horas previas al viaje, con excepción de los menores (la hacen los representantes legales) y los mayores de 70 años. Allí también se consignan datos de procedencia y filiatorios.

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