Abre la posibilidad para que los astronautas habiten el planeta por largos períodos de tiempo. Foto: Weekend

La NASA diseñó el MOXIE para ver cuánto oxígeno pueden producir a partir de la atmósfera marciana en un rango específico de tiempo. Foto: Weekend

MOXIE tiene el tamaño de una batería de auto. Foto: Weekend

Importante avance

El Perseverance consigue producir oxígeno en Marte

Gracias al dispositivo MOXIE, la agencia espacial logró convertir el CO2 de la atmósfera marciana en aire respirable. Un paso muy importante para los futuros planes de visitar el planeta rojo.

La NASA sigue consiguiendo éxitos a través de su rover Perseverance. Su último hito es haber conseguido producir oxígeno en Marte, algo impensado años atrás. Para ello el pequeño vehículo se valió de un dispositivo conocido como MOXIE, que fue diseñado para convertir el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera marciana en oxígeno.

El hecho es un paso enorme para los planes de la NASA en Marte, ya que abre la posibilidad para que los astronautas habiten el planeta por largos períodos de tiempo, además de que aseguraría su retorno a casa.

La atmósfera marciana está compuesta en un 96 % por CO2, el cual es vital para suministrar de oxígeno a los astronautas, pero también es muy importante para la propulsión de los cohetes.

La NASA diseñó el MOXIE para ver cuánto oxígeno pueden producir a partir de la atmósfera marciana en un rango específico de tiempo. Por el momento, su objetivo es conseguir 10 gramos por hora. En esta ocasión, “después de una hora de funcionamiento, el oxígeno total producido fue de aproximadamente 5,4 gramos, suficiente para mantener sano a un astronauta durante unos 10 minutos de actividad normal”, explicó la agencia espacial.

Por otro lado, para que un grupo de 4 astronautas regrese a la Tierra, se necesitan se necesitan 7 toneladas métricas de combustible para cohetes y 25 toneladas métricas de oxígeno. Mientras que para vivir durante un año en la superficie marciana solo utilizarían una tonelada métrica.

Para alcanzar estos números se utilizaría un convertidor de oxígeno mucho más grande que MOXIE, que tiene el tamaño de una batería de auto. Todavía falta mucho camino por recorrer para llegar a ese punto, aunque todo pareciera indicar que las proyecciones de la NASA están bien encaminadas.

En esta Nota