Lanzaron un telescopio espacial para realizar el mapa más grande del universo

El telescopio espacial Spherex de la NASA Spherex fue lanzado, con éxito, desde la base Vandenberg de la Fuerza Espacial en California, Estados Unidos, a bordo de un cohete de SpaceX con el objetivo de observar el cielo como nunca antes, proporcionando una visión amplia de cientos de millones de galaxias y su resplandor compartido desde el origen del universo, según informaron desde la mencionada agencia espacial norteamericana a través de sus redes sociales.

Con un costo de 488 millones de dólares, este telescopio de última tecnología, analizará la evolución de las galaxias y la rápida expansión del universo en sus primeras etapas, al tiempo que también explorará nuestra propia galaxia, la Vía Láctea, en busca de agua y de compuestos esenciales para la vida en nubes heladas donde nacen nuevos sistemas solares. Su particular diseño en forma de cono y sus 500 kilogramos de peso le permitirán mapear el cielo en tan solo 6 meses, utilizando tecnología infrarroja avanzada.

Spherex: telescopio espacial de avanzada

A diferencia de los telescopios Hubble y Webb, Spherex no se enfocará en imágenes detalladas de galaxias individuales. En cambio, captará el resplandor total del universo, incluida la luz de las galaxias más antiguas formadas tras el Big Bang, lo que les permitirá a los científicos de la NASA poder estudiar la historia cósmica desde una perspectiva distinta, ayudandándolos a identificar fuentes de luz que pudieron haberse pasado por alto en el pasado.

Para llevar a cabo su ambiciosa misión, el Spherex empleará detectores infrarrojos capaces de distinguir 102 colores invisibles al ojo humano, generando, de esa manera el mapa más colorido y grande del cosmos. Para mantener su equipo a temperaturas extremadamente frías, Spherex cuenta con un innovador diseño de conos de aluminio anidados que lo protegen del calor del sol y de la Tierra, asemejándose a un collar cónico gigante.

Además de la misión de Spherex, el cohete Falcon de SpaceX transportó cuatro satélites de la NASA denominados Punch, los cuales, en una órbita polar separada, estudiarán la corona solar y el viento solar, proporcionándoles a los especialistas información clave sobre la actividad del sol.

4o