La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

Planos de la Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

La preciosa Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata fue declarada Monumento Histórico Nacional. Foto: Weekend

VISITA IMPERDIBLE

Mar del Plata: la Villa Ortiz Basualdo ya es monumento histórico

Sus torrecitas dominan la avenida Colón desde la Loma Stella Maris, hoy convertida en Museo Castagnino. Abrirá los fines de semana durante el verano y es una puerta al pasado, a la belle epoque de la ciudad. Galería de fotos.

Por Patricia Daniele

La Villa Ortiz Basualdo de Mar del Plata, ubicada en la loma de la avenida Colón, fue declarada Monumento Histórico Nacional. La residencia construida en 1909 es una de las pocas que sobrevive de la Belle Epoque marplatense. Allí funciona desde hace unos 30 años el Museo Municipal de Arte Juan Carlos Castagnino y con esta declaración el municipio podrá preservar el edificio y fortalecer la divulgación de su patrimonio intangible. 
Ubicada en Avenida Colón 1189, en lo alto de la Loma Stella Maris, fue la primera casa con ascensor de la zona, construida por pedido de Ana Elía de Ortiz Basualdo sobre el diseño de los arquitectos Louis Dubois y Pablo Pater inspirado en los castillos franceses del Loire y construida por Leandro Bianchini.  La irregularidad volumétrica lograda, los diseños geométricos de “pan de bois” para la fachada y los techos de tejas de zinc con cresterías y pináculos le otorgaron un mayor efecto pintoresco y la jerarquización entre las distintas casonas del lugar.

Los expertos la definen como representante del pintoresquismo de comienzos del siglo XX. El primer piso de la Villa conserva una selección del mobiliario original de estilo art-nouveau del diseñador belga Gustave Serrurier-Bovy y equipamiento también original de la residencia en distintos ambientes: el oratorio, las salas de música y de lectura, el comedor principal, el comedor de niños, el office para mozos, tres dormitorios, un hall central con balcón para músicos, el toilette y el ascensor. Visitar estas habitaciones es la mejor manera de trasladarse a otra época, cuando allí vivía el hacendado Manuel Florentino Ortiz Basualdo y Dorrego con su familia, que veraneaban todos los años en Mardel. Originarios de la Capital Federal, la habitaron cada verano entre 1910 y 1970. La Municipalidad de General Pueyrredón se hizo cargo de su tenencia y salvaguarda en 1980. 



Originariamente, en la planta baja estaban distribuidas las dependencias de servicio (cocina, comedor de empleados y cuartos de labores domésticas), en el primer piso los ambientes de estar y reunión, en el segundo y tercero se ubicaban los dormitorios y baños, y en el cuarto nivel (ático) habitaciones para el personal y depósitos. El parque llegaba hasta la esquina de Viamonte y contaba con un sector de canchas de tenis.
Durante este verano la Villa abrirá al público jueves, viernes y sábados de 17.30 a 21. Habrá un aforo especial y protocolos específicos para las visitas. En la planta baja se expondrá la muestra de dibujos del maestro José Solla. Y como comentamos, en la plata alta se puede hacer un recorrido que evoca los usos y costumbres de los primeros veraneantes. Si están por la zona, no se pierdan la oportunidad de visitarla. Es inolvidable.

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