Desde hace casi dos décadas está vedada la pesca deportiva de la tararira en la provincia de Buenos Aires. La disposición Nº 177/07 es la que marca las restricciones y excepciones. Foto: Jorge Virgilio

Desde hace casi dos décadas está vedada la pesca deportiva de la tararira en la provincia de Buenos Aires. La disposición Nº 177/07 es la que marca las restricciones y excepciones. Foto: Jorge Virgilio

Desde hace casi dos décadas está vedada la pesca deportiva de la tararira en la provincia de Buenos Aires. La disposición Nº 177/07 es la que marca las restricciones y excepciones. Foto: Jorge Virgilio

HASTA FIN DE ENERO

Luz roja para la extracción de tarariras en la provincia de Buenos Aires

Este viernes da inicio la veda de la especie en todos los ambientes de aguas interiores del territorio provincial. Qué días se puede pescar, en qué modalidades y cuándo es permitido su sacrificio.

Por Jorge Virgilio

Cuando en 2007, Mauricio Remes Lenicov era director de Desarrollo Pesquero del Ministerio de Asuntos Agrarios y se resolvió vedar la pesca deportiva de la tararira en la provincia de Buenos Aires, el presente de la especie era muy complicado. El 9 de julio de aquel año se registró aquella nevada en gran parte del territorio provincial y la mortandad importante que se sufrió dejó un panorama gris. Con el paso del tiempo este combativo pez se fue recuperando pero no ha llegado a lo que fue en el pasado, principalmente por la escasez de lluvias que achicaron el espectro de posibilidades en las que la tararira estaba. La veda fue reglamentada a través de la Disposición Nº 177/07, la cual fue ratificada en 2018 por la directora María Cecilia Paris, responsable de la Dirección de Actividades Pesqueras y Acuicultura del Ministerio de Agroindustria. Al día de hoy, no hubo cambios en las reglamentaciones que se vienen reiterando, año tras año, desde aquellos tiempos.

La resolución indica que se aplica la veda de pesca de la especie tararira en todos los ambientes de aguas interiores de la provincia de Buenos Aires, desde el 1 de noviembre al 31 de enero de cada año. En dicho lapso, se permitirá la pesca deportiva, tanto en noviembre como diciembre, solamente los días sábado, domingo y feriados con devolución obligatoria e inmediata en el mismo lugar de pesca y con el menor daño posible; en cambio, durante el mes de enero se permitirá la extracción y sacrificio de tres ejemplares de la talla mínima permitida, por persona y por día, solamente los días sábado, domingo y feriados. Se establece como talla mínima de captura para la tararira el valor de 40 centímetros de longitud total, medidos en sentido longitudinal desde el extremo anterior de la boca hasta el extremo posterior de la aleta caudal.

Con respecto a las artes de pesca, la resolución permite el uso de caña y reel para las siguientes modalidades: “Spinning” o “Bait cast”, “Fly cast” y pesca con carnada natural; quedando prohibido cualquier otro arte y modalidad de pesca. Para el “Spinning”, y/o “Fly cast” se permitirá el uso de señuelos y/o artificiales de cualquier tipo. Para la modalidad pesca con carnada natural se autoriza el uso de cualquier línea (flote o fondo) confeccionada con hasta un máximo de un (1) anzuelo simple con una abertura mínima de veinticinco (25) milímetros. Se limita al uso de una (1) caña por pescador como máximo, para el desarrollo de cualquiera de las modalidades de pesca indicadas en el artículo precedente, quedando prohibida la pesca simultánea con más de una caña y/o modalidades.

Otro punto a tener en cuenta, es el artículo 12 de la Disposición N° 177/07, que señala que las jornadas de pesca de la tararira en cualquier ambiente de aguas interiores de la provincia de Buenos Aires, deberán coincidir con las horas de luz natural, es decir, no está permitida la pesca nocturna.

Es muy importante cuidarlas ya que es una especie que tuvo un franco descenso en la provincia, sumado a la sequía que no ayudó a fortalecer su presencia, muy diezmada a partir de 2007, año dónde llegó a nevar en la Capital Federal y las tarariras llegaron casi a desaparecer de las lagunas bonaerenses. Estudios y trabajos biológicos indican que por cada desove llegan a adultas menos de una tararira cada 100 huevas fecundadas, la cual en estado adulto es un predador, pero en sus primeros meses es alimento de otras, llegando, un ínfimo porcentaje a feliz término. Es muy importante la devolución en el mismo lugar de captura, ya que se encuentran, muchas veces, cuidando el nido, y tratarlas con el menor daño posible.

En esta Nota