Es un clásico de la autovía 2 y un combo de lujo que viene dando rindes parejos desde los meses cálidos, si es que de pejerreyes hablamos. Pero los primeros fríos le sentaron muy bien a estos espejos conectados, porque desactivaron en gran medida a los juveniles y a los dientudos, permitiendo que sean los pejes de 30 en adelante los protagonistas.
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Y así las cosas, ante unas heladas que tardaron en llegar, pejerreyes de 20 a 30 eran los que enseguida se abalanzaban sobre los cebos hasta hace tres semanas, obligándonos a usar anzuelos 1 o 1/0 para seleccionar las piezas a fuerza de errar clavadas y darle tiempo al grande a comer manteniendo el aparejo más tiempo en el agua. Pero todo cambió casi mágicamente, como si se tratase de una fórmula matemática infalible, cuando llegó el frío y estos espejos empezaron a soltar sus mejores tesoros. E incluso a sorprender por tamaño, con algunos ejemplares que arrimaron a los 40 cm, nada mal para lagunas ubicadas a 144 km de la Ciudad de Buenos Aires, por autovía 2, con acceso íntegro por asfalto.
Weekend, julio de 2015. Si querés adquirir el ejemplar, pedíselo a tu canillita o llamá al Tel.: (011) 5985-4224. Para suscribirte a la revista y recibirla sin cargo en tu domicilio, clickeá aquí.30 de junio de 2015
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