Tras sortear satisfactoriamente un tratamiento de 3 meses de rehabilitación, un águila mora (Geranoaetus melanoleucus) fue liberada en una zona rural cercana a la Reserva Natural Rincón de Ajó - al norte de la localidad bonaerense de San Clemente del Tuyú-. según informó la Fundación Mundo Marino.
Actualmente, esta especie se encuentra seriamente amenazada tanto por la transformación de sus hábitats naturales en las zonas productivas, como por la utilización de cebos tóxicos colocados intencionalmente y, aunque en menor medida, también por la caza y el tráfico ilegal.
La hembra subadulta había sido encontrada, a principios del pasado mes de julio, en un terreno baldío de esa localidad costera por un lugareño que, tras observar que tenía un ala caída que le impedía volar, la atrapó y la llevó a la institución especializada en aves rapaces, El Niego, que está ubicada en localidad balnearia de Las Toninas, para su evaluación y asistencia inmediata.
Cumpliendo con lo establecido por protocolo sanitario, tras revisar pormenorizadamente al águila mora, los profesionales de dicha institución informaron de su presencia a la Dirección de Flora y Fauna de la Provincia de Buenos Aires, quien, a su vez, dispuso que fuera trasladada al Area de Rehabilitación de Animales Terrestres que la Fundación Mundo Marino posee en San Clemente del Tuyú.
“Durante el examen clínico pudimos hacer una revisión detallada de sus huesos y articulaciones. No detectamos presencia de fracturas, lo cual coincidía con los resultados de la radiografía que le habían realizado en n El Niego”, comentó Mauro Andrés Pergazere, médico veterinario del Parque Educativo Mundo Marino.
“Cuando llegó observamos que su ala derecha estaba caída. Para su examen, se procedió a anestesiarla por vía inhalatoria, con el objetivo de generar el menor estrés posible en el animal durante la revisión. Así, pudimos tomar muestras de sangre y realizarle un examen clínico general que incluyó evaluación cardíaca, respiratoria y estado nutricional. También nos permitió revisar sus ojos, su pico y sus garras”, agregó el especialista.
Tras los estudios, los especialistas determinaron que la lesión estaba ubicada a nivel muscular, por lo que creen que la caída del ala derecha y la imposibilidad de levantar vuelo estuvieron vinculadas a un factor externo, compatible con un golpe ocasionado, posiblemente, por un proyectil de una gomera.
Para llevar a cabo el tratamiento de rehabilitación que se extendió por tres meses, los profesionales mantuvieron al ave rapaz en un recinto de aproximadamente unos 2,5 metros de alto, en cuyo interior colocaron varios troncos a diferentes alturas para evitar que el ave hiciera sobreesfuerzos y estimulara un proceso progresivo de musculación. Además, le suministraron un complejo vitamínico y varios antiinflamatorios.
Para darle el alta médico-veterinaria fue determinante el hecho de que el águila mostrara buenas aptitudes de caza cuando se le ofrecieran presas vivas.
“Para nosotros es muy importante que se conozca el trabajo de rehabilitación que hacemos no solo con animales marinos, sino, también, con muchas especies de animales terrestres. Tanto el Parque, como la Fundación, tienen un plantel de profesionales muy capacitados para atender a diversas especies de animales que necesitan auxilio”, señaló Andrea Cabrera, vicepresidenta de la Fundación Mundo Marino.
“Desafortunadamente, en todos los años que llevamos adelante este trabajo de rescate y rehabilitación podemos afirmar que el origen de la mayoría de los problemas que afectan a todas las especies con las que tenemos contacto es antrópico, o sea están directa o indirectamente relacionadas a actividades humanas,” concluyó Cabrera.
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