Friday 29 de March de 2024
ESCALADA | 26-09-2017 08:38

Mano a mano con la montaña

Cómo es el ascenso en solitario, una modalidad extrema en la que le montañista solo cuenta con su cuerpo y su mente. Una manera de desafiar límites y tutearse con el peligro. Galería de imágenes.
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Se trata de una disciplina tan antigua como el instinto natural de los seres humanos de trepar y desafiar los límites. Escalada extrema, sin cuerdas, ni seguros, ni arneses, ni cualquier tipo de protección que pueda salvar al escalador si realiza un mal movimiento, comete un error y se cae. También conocida como escalada en solitario o libre, o solo libre, esta modalidad se basa únicamente en la fuerza del físico y de la mente, así como en la capacidad de trepar y estar preparados para lo peor. Será por ese motivo que también aseguran que se trata de una práctica muy profunda.

En Argentina el free soloing está prohibido tanto en Parques Nacionales, tierras y campos privados como clubes deportivos o escuelas de escalada, aunque según asegura Hernán del Ri, director de Escalando, escuela de escalada deportiva (www.escalando.com.ar), andinista y competidor desde 1988, soloing se ha practicado siempre. “El free soiling es el estilo de escalada más peligroso, ya que no supone ningún margen de error técnico, físicoo psíquico y cualquier fallo equivale a una muerte segura. Unas de las primeras experiencias en nuestro país fue el ascenso al Pico Internacional del Cerro Tronador, en Bariloche”, explica Del Ri, quien alguna vez probó la experiencia. Y añade: “La sensación es de entrega espiritual completa, visión tipo ‘túnel’ de concentración absoluta y la adrenalina casi constante que significa estar consciente del estado de exposición que no nos permite fallar”.

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Misión imposible

El film “Misión Imposible II” comienza con una escena para el recuerdo. En medio de una inmensa geografía rocallosa, el protagonista Ethan Hunt (Tom Cruise) escala sin arneses ni cuerdas un paredón colosal mientras los títulos corren al pie de la pantalla. Enseguida empieza a sonar “Iko-Iko”, de Zap Mama, y el hombre ensaya un salto de una pared rocallosa hacia otra, resbala y cae deslizándose por la piedra hasta colgarse de una sola mano sobre el precipicio. El hombre respira, se concentra, gira sobre sí mismo hasta quedar abierto de brazos de cara al abismo. Suelta una mano, se toma de otra arista, y así continúa avanzando hasta llegar a la cumbre, donde recibirá las coordenadas de su primera misión… imposible. Aunque llevada al extremo, aquella primera estcena del film de John Woo describe como pocas la adrenalina del free soloing o solo integral. Una modalidad que generalmente puede practicarse en los mismos destinos donde se hace escalada, aunque también hay antecedentes en grandes edificios, torres y antenas.

Básicamente, la diferencia sustancial con los demás estilos de escalada (deportiva, tradicional en roca, montañismo o competencias) es que esas modalidades menos extremas son mucho más seguras y permiten disfrutar a pleno de la montaña con amigos o en familia.

Bouldering

Según el director de Escalando, una variante de soloing es el bouldering. Consiste en escalar bloques de roca o pequeñas paredes de hasta seis metros de altura máxima, sin la necesidad de los materiales de protección convencionales de la escalada (cuerda, arnés, elementos de fijación), donde se utilizan colchonetas transportables de alto impacto (crash-pads). También la práctica indoor (bajo techo), donde solamente escalan con las zapatillas técnicas y un recipiente en la cintura con polvo de magnesio (como en la gimnasia deportiva). “Es unas de las disciplinas más atléticas, donde se utilizan las técnicas, posturas y movimientos más refinados y puros que ofrece este deporte en la actualidad”, concluye Del Ri.

La escalada en solitario libre no debe confundirse con la escalada libre en general, en la que el engranaje se utiliza normalmente para la seguridad en caso de una caída, pero no para ayudar a la subida. Para aquellos interesados en profundizar más sobre esta disciplina, existen distintos films que se meten de lleno en ella. Tal el caso de “Cumbre”, de Fulvio Mariani, una de las mejores películas de escalada que documenta la primera ascensión solitaria del cerro Torre, que llevó adelante el mítico alpinista Marco Pedrini en 1985. También la serie de películas de escalada Master of Stone, con producción de Eric Perlman, en las que –entre otros– se puede ver a Dan Osman en el escalofriante speed free solo.

El máximo exponente

El documental “Soloinge” (realizado por la National Geographic) aborda un histórico ascenso de Alex Honnold, uno de los principales referentes de est e depor te. “Hubo un momento en que pensé que ya había llegado la hora, que me sentía harto de estar colgado de cuerdas y decidí correr el riesgo. De esta forma, pasó de ser una idea intimidante a estar emocionado por hacerlo”, cuenta el andinista estadounidense en este documental grabado el 15 de enero de 2014, cuando escaló en estilo solitario el Sendero Luminoso, en el Potrero Chico, México, en poco más de tres horas. El ascenso es de 762 metros hasta la cima de El Toro, y muchos la consideran como la escalada sin cuerda más difícil de la historia. Justamente, los motivos para realizar los solos libres que esgrimen los escaladores de alto perfil incluyen la simplicidad y la rapidez con la que se puede subir en pocas horas una ruta que normalmente –utilizando cuerdas y protecciones– exige varios días. Estrella indiscutible del free solo, Honnold ha roto varios récords de velocidad, entre los que se destaca el triple ascenso logrado en solitario con un tiempo de 18 horas y 50 minutos de los montes Watkins, The Nose (El Capitán) y la cara noroeste del Haf Dome (ver en página anterior: “Honnold: rey del free soloing”). En cualquier caso, si bien es una práctica desaconsejada por la posibilidad de que el mínimo imprevisto tenga un desenlace fatal, generalmente los escaladores de esta disciplina buscan vías que ya conocen muy bien, incluso muy por debajo de su nivel como escalador, para así disminuir los riesgos de caída.

Suelen basarse en el principio de progresión para disminuir ligeramente los peligros, de manera que antes de ascender en solo realizan algunos intentos con cuerda o línea de vida. Esto ayudará al escalador a conocer el manejo y desarrollo de la técnica a utilizar en esa vía. Y le permitirá conocer el grado de esfuerzo, de concentración y voluntad que va a tener que desarrollar hasta alcanzar la cima.

Nota completa publicada en revista Weekend 540, septiembre 2017.

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Marcelo Ferro

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