Riberas del Plata

Sábado, siete de la mañana. La caravana de autos avanza despacio, en parte por la niebla que nos rodea, en parte por la cantidad de lomos de burro que tapizan el impecable camino asfaltado e iluminado que va a depositar a algunos de los integrantes de Amigos en Kayak.Com en la costanera de Hudson. Como pasa casi siempre, un miembro del foro tiró la idea y fue cosa de arreglar una fecha y dejar la salida coordinada. Algunos iban directo, otros nos encontrábamos pasando el peaje, pero todos con la misma idea: probar un nuevo pesquero en una salida grupal, de esas que siempre nos dejan alguna anécdota para recordar en la próxima ocasión que nos juntemos.

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Una vez arribados al portón del camping, caímos en la cuenta de que abría sus puertas a las 8 de la mañana, por lo que mate y charla de por medio se fue matizando la espera. Con puntualidad inglesa procedieron a permitirnos el ingreso y con gran expectativa acercamos los vehículos hasta la orilla (literalmente al borde del agua) y procedimos a bajar los kayaks y preparar el equipo.

Antes de las 9 de la mañana dejábamos la costa atrás y entre la bruma que se iba disipando y un río planchado, cerca de 16 kayaks comenzaron a buscar lugares viables. Algunos fondeados, otros estirando la remada para poder probar un garete corto, pero todos con la misma meta: pescar buenos pejerreyes.

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Previo a entrar al agua habíamos repartido las bolsas con mojarras vivas y algunos le iban a sumar mojarra salada y hasta tiritas de pejerrey para incentivar el pique. Por la ausencia de viento, nadie empleó ancla de capa, muy útil para frenar nuestro garete cuando el viento acelera al deriva.

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Mientras aún algunos estábamos remando para buscar un point donde comenzar la jornada e íbamos atravesando la flota que se había fondeado en la franja de los 600 a 700 metros, se empezó a escuchar desde algunos kayaks que aparecían los primeros piques y capturas de pejerrey, por lo que se podía augurar una buena pesca.