Realizando un nuevo tour partimos a Costa Rica junto a cuatro pescadores: Marcelo, Hugo, Darío y Osvaldo. Como en cada salida, las expectativas siempre son inmensas. En el vuelo que nos traslada a cada destino, junto a nosotros viajan una infinidad de sueños con respecto a las capturas que podemos llegar a lograr. Un tour se organiza siempre en función del destino al que se va visitar. En Costa Rica dedicamos los dos primeros días íntegramente a la pesca. Luego hay una jornada de descanso que por lo general la utilizamos para conocer el Parque Nacional de Manuel Antonio, disfrutar sus playas paradisíacas y caminar por el pequeño y pintoresco pueblo de Quepos.
La Barrancosa: 200 hectáreas con piques activos
Después hacemos dos días más de intensa pesca.
En Costa Rica hay tres modalidades de pesca. La primera y más conocida mundialmente es el trolling, que consiste en arrastrar diferentes tipos de señuelos y carnadas naturales para que especies como marlin, pez vela, atún, dolphin y wahoos los ataquen, ya que todos estos son peces cazadores.
La segunda alternativa es el deep jigging, que cada día gana más adeptos en el mundo entero. Se realiza sí o sí sobre zonas de lechos rocosos en donde viven infinidad de especies, tanto de fondo como de media agua. Los peces atacan a los jigs dado que simulan pequeños ejemplares heridos que tratan de escapar de sus depredadores. Las especies más comunes que encontramos en zonas de piedra como el famoso banco Furuno, son amberjack, pargos sedas, pargos lisas, bonitos de portes muy grandes, cabrillas panza blanca y, en ocasiones, atunes aleta amarilla.
Las condiciones del lugar
El tema es que no siempre están dadas las condiciones para practicar el deep jigging en este lugar, ya que muchas veces depende de cómo se encuentra la marea, la corriente que haya en el momento y la claridad que tenga el agua.
La tercera y última modalidad de pesca que podemos efectuar en Costa Rica es el popping. Por lo general, la hacemos muy cerca de la costa y sobre piedras que afloran en superficie, que son habitadas por gran cantidad de peces forrajeros, acechados por especies sumamente deportivas como los roosterfish (más conocido como pez gallo), trevallys, macarelas, pez aguja, pargos cola amarilla, pargos raqueros y gran cantidad de variedades muy exóticas para nosotros.
Nota publicada en la edición 499 de Weekend, abril de 2014. Si querés adquirir el ejemplar, llamá al Tel.: (011) 4341-8900. Para suscribirte a la revista y recibirla sin cargo en tu domicilio, clickeá aquí.
Galería de imágenes
Comentarios